martes, 2 de enero de 2007

Lo hablaba con mamá y con algunos amigos, esto de que el año que empieza empujó al que termina, que no tuvo momento de balance, simplemente no hubo, que pasó sin darnos cuenta y con la sensación de una noche que seguir de largo haciendose día, pleno día. Soy absolutamente ritualista, necesito mas que muchas otras cosas en la vida esa parafernalia mágica, esa señal de que lo que viene va a ser nuevo y mejor.En lugar a eso hubo una especie de performance, porque todo happens así, cada vez mas libre, mas sin motivos que apelan a la razón u a lo concreto, muy piscis.
Una fiesta en el barrio, en la misma calle tan de siempre, demasiado lleno de pasados que se abarrotan en el mismo espacio geográfico que terminan siendo (hace tiempo) absolutamente cotidiano. Es casi increible que en la misma calle haya tantas de esas cosas juntas, como un vecindario de sucesos.Paso por enfrente de mi escuela primaria. La nuestra, digo, porque estoy con B. y ella fué a la misma pero turno tarde y yo turno mañana, nos miramos y esbozamos una sonrisa. Estamos muy acostumbradas a eso de la escuela. La calle está cortada por la fiesta. Juventud (de la bella más que nada) a rolete.
Este rincón de Almagro parece Gessell, se siente una vibración a recital y lo siento como si fuese un regalo, un regalo misterioso. Estoy en un ámbito agradable, pienso contagiarse la energía del otro, como ese disco de El otro yo: ya no es la calle conocida, es un lugar lleno de caras conocidas que reformulan todo a mi alrrededor, lo vuelven muy agradable. Esta sensación muy antes está muy asociada al placer, al regocijo y a mezclarse.¨Este año es así y está bien¨, me digo, tratando de no compararlo con otros. La consciencia sabe cual es el punto.Hoy hubo leves señales de tensión que pienso que podría haber evitado (siempre pienso eso), tranquilamente. La idea es justamente esa: aprovechar la tranquilidad para encarar lo importante. Pero existe la parte contradictoria que quiere volver a lo conocido para comprobar que sigue existiendo o algo así. Ambos polos están ahí, aquí y ahora. Creo que, por correspondencia, los momentos de verdaderos comienzos necesitan para existir cierto grado de tensión (variable).Será una conclusión?

4 comentarios:

Fishboy dijo...

todo lo que usted hace es bonito, iclusive usted, bonita,
besos y mucha suerte e ideas para tu nuevo blog "cool" (jeje)

Anónimo dijo...

Hola Lu: la saludo en su nueva casa.
Fish: veo que a todas les dice lo mismo. Pero los hombres no me despiertan nada desde hace exactamente tres meses, nada de nada. Puede ud. hacer lo que quiera. Lo comparto con Lu.

Ah, parece que somos vecinas, almagro village!

Anónimo dijo...

Fish, ud sabe le agradezco como siempre., pero creo que ha puesto en palabra mis pensamientos: decidasé de una vez, ya pasaron los tiempos del harenes.
Oh: Fíjese que estamos en la misma etapa, y tres meses es una de las medidas que mas frecuentemente uso, siempre impar, siempre tres.
Pero en mi caso pasó mas tiempo y esta etapa ya no sé ni como mencionarla.: hermafrodita? fantasmita? no sé.

Ana y su rizoma dijo...

Me gusta almagro, sobre todo en tu retrato de fiesta medio triste, medio optimista. Me gusta empezar nuevos años, sobre todo antes de que empiece.
Saludos.


wait a minute mister postman!